LAS EMOCIONES TAMBIÉN SON ESTRATEGIA (SÍ, SENTIR ES PARTE DEL PLAN)
Ya llevamos dos artículos conversando, y la verdad, me encanta que sigas por acá. Me gusta poder contarte anécdotas, aprendizajes, errores (que también enseñan) y esos pensamientos que se nos cruzan mientras hacemos lo que más nos apasiona. Hoy estoy un poco más reflexivo, lo admito… y quería hablarte de algo que en Pombo vivimos muy de cerca. Y si trabajás en este mundo del marketing o la comunicación, seguro que a vos también te ha pasado. Antes de que aparezca la pauta, el diseño impecable o el copy perfecto, pasa algo más. Algo que no está en el brief, pero que cuando aparece… se siente. Es como ese escalofrío que recorre el cuerpo cuando una idea te toca.Ese algo que no sabes explicar, pero que te mueve por dentro.Ese nudo en la garganta cuando una historia se parece demasiado a la tuya.O esa carcajada espontánea que te lleva a compartir un video sin pensarlo. Eso no es casualidad. Eso es estrategia emocional. Y sí, aunque suene raro, sentir también es parte del plan. Porque, seamos sinceros: las decisiones no siempre nacen desde la lógica.Puedes tener la campaña más linda, perfectamente segmentada, con el presupuesto ideal… pero si no provoca nada, se pierde. A nosotros nos ha pasado muchas veces. Ideas que nacen en una conversación casual. Frases que aparecen de golpe y hay que correr a anotar antes de que se esfumen. Insights que nos han hecho llorar (de verdad) y otros que nos han hecho reír hasta las lágrimas. Y cuando eso pasa, el equipo se mira y dice: “Acá está.” No suena a marca. Suena a persona. Muchas marcas todavía creen que lo emocional es algo blando, difícil de medir, medio etéreo.Pero te lo digo con total certeza: las campañas que más resultados han dado a nuestros clientes han sido las que conectaron emocionalmente. Las que apelaron a la nostalgia con intención.Las que se expresaron con autenticidad. Las que no buscaron la perfección, sino la verdad. Y sí, usamos inteligencia artificial. Claro que sí. Nos encanta. Nos ayuda a analizar, a automatizar tareas, a optimizar tiempo. Pero hay algo que nunca vamos a delegar: el toque humano. La IA puede escribir diez versiones de un texto. Pero solo vos sabés cuál de esas versiones realmente te mueve. Y ahí entramos nosotros. Usamos la tecnología, sí, pero para crear humanidad. En Pombo, cada vez que empezamos un proyecto, nos hacemos una pregunta muy simple (pero muy poderosa): ¿Qué quieres que sienta tu cliente cuando se encuentra con tu marca? Desde ahí parte todo.Pensamos como personas, no como cargos.Elegimos palabras que toquen.Revisamos si lo que hicimos realmente se siente.Y si no, volvemos a empezar. Con intención, con propósito, sin miedo. Antes de cerrar, quiero decir algo fuerte (y que me gustaría tener pegado en la pared con letras enormes): Emoción no es improvisación. Una campaña emocional no es un “me salió bonito”.Es observar, escuchar, entender al otro de verdad. Porque en este mundo que va tan rápido, donde el scroll nunca se detiene, lo único que logra que alguien se quede… es lo que le hace sentir algo. Así que la próxima vez que te sientes a pensar una campaña, no empieces por el “¿qué quiero decir?”.Mejor preguntate: “¿Qué quiero que sientan?” Y si tenés clara esa emoción… todo lo demás fluye. En Pombo lo tenemos claro:Sentir también es estrategia. Y lo que se siente de verdad… no se olvida jamás. ¿No te parece? Te mando un abrazo grande, y te dejo con esta invitación: ¡Sigamos creando cosas que despierten emociones! No veamos a las personas como datos. Ese es uno de los errores más grandes que podemos cometer. Y este cierre ya me dio el tema para el próximo artículo. Pero si hay algo que te gustaría que hablemos, escríbenos.Nos encantaría escucharte. O mejor dicho… sentirte.
LAS EMOCIONES TAMBIÉN SON ESTRATEGIA (SÍ, SENTIR ES PARTE DEL PLAN) Read More »